Vitaly y Yulia Stepanov pasaron de ser personas anónimas en su país a traidores de la patria en cuestión de minutos. Concretamente, en 60. Esa es la duración del documental “Dossier secreto dopaje: Cómo Rusia crea a sus ganadores” que la ARD emitió la noche del 3 de diciembre de 2014 y en el que el matrimonio revelaba que en su país era imposible ser deportista de élite sin recurrir al dopaje.
“Todos los atletas rusos nos dopamos en algún momento. Los atletas no piensan que hagan algo indebido cuando usan sustancias prohibidas” afirmaba Yulia Stepanova en un momento de aquel documental. El matrimonio Stepanov tuvo que abandonar Rusia aquel día y la Agencia Mundial Antidopaje creó una Comisión Independiente para investigar el caso a raíz de las denuncias emitidas en la televisión alemana, a pesar de que los Stepanov habían contactado sin éxito con la Agencia Mundial cuatro años antes.
La primera parte del Informe de la Comisión Independiente de la AMA, publicado el 9 de noviembre de 2015, confirmaba todas aquellas denuncias. El informe ponía de manifiesto las prácticas sistemáticas de dopaje en el atletismo ruso, en la que participaban las propias entidades responsables del atletismo de aquel país, la agencia antidopaje (RUSADA) y la federación internacional de atletismo (IAAF).
Dos semanas después, la AMA declaraba a la Agencia Antidopaje de aquel país en no cumplimiento y la IAAF decidía suspender a la federación rusa de sus funciones.
La situación se agrava el 14 de enero de 2016 cuando la Comisión Independiente publica la segunda parte de su informe, en la que se constata que Lamine Diack, el expresidente de la IAAF, es el principal responsable de la trama de corrupción y encubrimiento de positivos en Rusia.
- Resumen de los informes de la Comisión Independiente de AMA en Deporte Limpio, el espacio de la AEPSAD en Radio Nacional de España.
En mayo de 2016, Grigory Rodchenkov, exdirector del laboratorio antidopaje de los juegos olímpicos de invierno de Sochi 2014, revela en The New York Times que las autoridades rusas establecieron un sistema para falsificar los controles antidopaje y encubrir positivos. La Agencia Mundial Antidopaje encarga a Richard McLaren la investigación de estas denuncias y en julio de 2016 se publica la primera parte del Informe McLaren. El estudio demuestra que el Ministerio de Deportes de Rusia “organizó, controló y supervisó un dopaje sistémico en el país entre los años 2011 y 2015”. La metodología de desaparición de positivos afectaba a la mayoría de los deportes.
- Resumen de la primera parte del Informe McLaren en Deporte Limpio, el espacio de la AEPSAD en Radio Nacional de España.
La AMA recomienda prohibir a la delegación rusa participar en los Juegos de Río, pero el Comité Olímpico Internacional determina dejar en manos de las federaciones internacionales la decisión. El COI establece que todos aquellos deportistas que hayan dado positivo, aunque ya hayan cumplido la sanción, quedan excluidos y Yulia Stepanova no puede participar en la cita olímpica, a pesar de que su testimonio fue el punto de partida de las investigaciones para denunciar esta importante trama de dopaje.
Al final 271 deportistas rusos participaron en los Juegos Olímpicos, un 70 % de toda la expedición que en principio iba a viajar a Brasil.
Reformas en Rusia
Rusia ha hecho algunas reformas en todo este tiempo para intentar volver al cumplimiento con el Código Mundial, pero sigue sin admitir que en su país hubiera dopaje de estado. Lo confirmó Vitaly Smirnov, jefe de la comisión que debe reformar el antidopaje en el país en la última reunión del Consejo Fundacional de la AMA, hace tres semanas. “Las sanciones fueron injustas. Muchos deportistas limpios se quedaron sin competir en unos JJ.OO. No ha habido dopaje de estado en Rusia”.
Rob Koehler, director general adjunto de la AMA, admitió en ese mismo escenario que todavía quedan muchos aspectos que mejorar para que RUSADA vuelva al cumplimiento. Veremos si la publicación mañana de la segunda parte del Informe McLaren empeora aún más la situación del antidopaje ruso o supone un respiro para sus representantes.